Pero recién cuando la mente deja de escapar por la vía narrativa, abandonas la mirada evasiva para regresar a una mirada calma, y así podrás ver y también ser visto. Asimismo, cuando reconocemos un patrón como patrón, nos liberamos de él por el simple hecho de que ha sido visto. La acción de “verlo” implica que ya no tiene ningún control sobre nosotros porque el espacio que lo rodea se ha expandido. Este espacio, conocido como nirodha, se asemeja mucho a un campo de fuerza o a una energía creativa que nace cuando el vrtti es visto como es; de igual modo que, en cuanto abandonas una adicción habitual, pasas a disponer de más energía para nuevos proyectos, pues ya no estás atado por patrones repetitivos e inconscientes. Cada vez que avanzamos o nos detenemos, creamos un ser, es decir, una estructura o edificio que nos hace sentir insertos en algo. Pero este ser no está unificado; al igual que la respiración, aparece y desaparece con la experiencia