—¿Qué somos, Amanda?
—¡Qué manía tienes de ponerle nombre a todo, míster Etiquetas! Sé lo que no soy ni seré: no soy tu novia, ni tu prometida, ni tu pareja, y menos aún tu esposa. Podemos viajar, salir, alquilar una casa de campo, ser amigos, amantes, tal vez tener hijos, pero quiero que tengas clara una cosa: jamás seré de tu propiedad.