Agostina Salvaggio

Además, desde el punto de vista evolutivo el amor de hombre a hombre sería más fácil, probablemente resultaría más satisfactorio ya que no necesitaría superar esos últimos restos de extrañeza entre el hombre y la mujer y carecería de toda añadidura de sadismo que envenena la relación entre ambos sexos. Tampoco está contra la “naturaleza” masculina, ya que ésta es bisexual; incluso esta incapacidad

hombre no puede aceptar el amor físico del hombre aun cuando se siente psicológicamente de lo más ligado a él? No iría en contra de la naturaleza del eros, que celebraría un triunfo especial con la superación de la rivalidad natural entre los hombres (suspensión de la envidia). Además, desde el punto de vista evolutivo el amor de hombre a hombre sería más fácil, probablemente resultaría más satisfactorio ya que no necesitaría superar esos últimos restos de extrañeza entre el hombre y la mujer y carecería de toda añadidura de sadismo que envenena la relación entre ambos sexos. Tampoco está contra la “naturaleza” masculina, ya que ésta es bisexual; incluso esta incapacidad no siempre existió, sólo a nosotros nos parece actual, tampoco a todos. Donde existe es insuperable. Quien se topa contra ella sufre sin esperanza alguna. ¿Cuál es el fundamento de este rechazo aparentemente elemental y empero incomprensible a través de los elementos? No se sabe y la narración no hace ningún intento por descubrirlo. Seguramente con razón. Apunta a la antigua relación con el padre, muestra la búsqueda de compensación por medio de una forzada exageración de la virilidad, pero se conforma con exponer el problema tal como se lo encuentra.

Esta representación transcurre con tal arte, franqueza, amor por la verdad y sinceridad, tan libre de toda hipocresía o sentimentalidad

El conflicto se basa únicamente en que el muchacho querría corresponder al amor del hombre pero no puede hacerlo por una íntima prohibición inexplicable.