Todo Diego es político no es un libro sobre fútbol ni tiene ansias biográficas, está lejos de querer responder o resolver lecturas ajenas sobre Diego Armando Maradona. Más bien, es una invitación a relamerse en el signo abierto, a entregarse a las contradicciones, a morder el fruto.
Los diez textos que hacen a esta compilación sostienen la tensión entre los guiños divinos y los anclajes terrenales para exaltar lo innegable: nadie es indiferente a Diego y esa no indiferencia revela todo lo indecible, lo tabú, lo estructural, justo ahí donde se revierten los órdenes impuestos.
Como un destino inevitable, Todo Diego es político replica el caos de esa reversión, se excede entre el Verbo y la carne, irrumpe en el banquete de los dioses y baila sobre la mesa al ritmo de la cumbia. Su pulsión celebratoria no tarda en desembocar en un aquelarre maradoniano. Para entrar acá no hay que abandonar la esperanza, alcanza con abandonar las caretas y hundirse en el barro.
Todos invitados. El fuego ya está encendido.
Acerca de Bárbara Pistoia:
Ensayista y editora, su trabajo de campo toma a los conflictos raciales como centro para abordar la relación entre escenarios sociales y movimientos culturales. Siguiendo las huellas de estas tensiones y tomando las virtudes del hip hop, creó y coordina Hiiipower Club. En el 2019 publicó Por qué escuchamos a Tupac Shakur (Gourmet Musical Ediciones). Escribe en diferentes medios culturales. Desde el 2018 edita Delivery, un newsletter con textos críticos que, a través de artes y estéticas generalmente contemporáneas, invitan a pensar la manera en la que habitamos nuestros espacios. Entre el 2001 y el 2018, tanto en el ámbito público como privado y del tercer sector, se dedicó a la comunicación y gestión cultural.
Autoras:
Natalia Torres es periodista, Águeda Pereyra es psicoanalista, Carina González es psicoanalista, Javiera Pérez Salerno es licenciada en Letras y productora digital, Yanina Safirsztein es psicoanalista, Florencia García Alegre es licenciada en Comunicación Social, Ayelén Zabaleta es comunicadora, Sofía Ferro es correctora literaria, periodista y editora y Lorena Álvarez es crítica especializada en cultura televisiva.
Estos dos acontecimientos, porque ya no tiene sentido alguno fingir una reducción a “goles”, no vienen a cerrar un asunto, no vienen a darnos respuestas, es esa memoria que no olvida la que nos sitúa con la interrogación abierta: ¿qué país fuimos? ¿Qué país nos dijeron que fuimos? ¿Qué país somos? ¿Qué país nos dicen que somos?
