Un lugar para el amor

De todos modos resultaba deprimente que Spenser fuera el primer hombre desde hacía siglos en despertar en ella algo que no fuera aburrimiento. No era en absoluto su tipo, sin embargo… De todos modos había algo relacionado tal vez con la arrogancia, por no mencionar con el cuerpo, con la cara o con ese cabello de aspecto sedoso, que la empujaba a tirarse al suelo

Avergonzada, ella se apartó bruscamente de él al darse cuenta de que había estado soñando con aquel hombre como la adolescente enamorada que espera un beso al final de su primera cita.

Para Addy ese gesto fue como una caricia, y sintió que sus labios se ablandaban en respuesta a esa mirada

allí sola delante de las ventanas de