Las distinciones cada vez más difusas entre originales y copias, autoridad y apropiación, creación y posproducción, copycontrol y copyleft estaban en el centro mismo del circuito abierto por Nuevos Ricos, utopía virtual de un arte de la dispersión y la distribución, el uso y la traducción, sin localización geográfica precisa ni marcas identitarias nacionales, que sin embargo reunía indiscriminadamente música de aquí y de allá, se nutría de las peculiaridades estéticas, culturales y económicas de una empresa local, y hasta conseguía invertir la dirección clásica de los intercambios entre la periferia y los centros.