Crónicas bárbaras

La solidaridad no es dar lo que sobra, es dar lo que se tiene.

Estas tres cosas las van a necesitar también en la adolescencia, momento en el que todo se complica. Aunque la rechacen, seguirán necesitando ternura; aunque protesten, seguirán necesitando límites; aunque no quieran comunicarse en esos años, seguirán necesitando comunicación.

Veo a alguien que no murió en el accidente, pero que no ha vuelto a vivir

No es natural. Sabemos lo que es dar vida, no sabemos lo que es que nos quiten a personas llenas de vida.

Porque no tiene nombre. No es natural. Sabemos lo que es dar vida, no sabemos lo que es que nos quiten a personas llenas de vida.

Yo estudio uno de esos mecanismos de envejecimiento, que se llaman telómeros

«Con una situación así, otro profesor no habría ideado esto —apunta su madre—. Esto sólo se le puede ocurrir a un enamorado de su profesión como es Javier. Los niños son plastilina. Si caen en manos de alguien que merezca la pena, pueden cambiar el mundo».

, pero a mí nunca se me ha ocurrido darle un cigarro a mi hijo con dos años. Pero estoy harto de ver a padres que le dan la tablet a bebés para que no den la murga en un restaurante. Yo lo primero que hago nada más levantarme es encenderme un cigarro. Cualquiera que haga lo mismo con el móvil tiene un problema

El problema es que los niños no admiten la frustración. Y la frustración es muy buena. Estamos haciendo unos niños muy light. Y la vida es dura.

Hay quien le mira a la cicatriz con lástima. Ese gesto del que frunce el ceño y se muerde el labio. Esta gente no sabe que en la vida hay heridas que sólo pueden ser celebradas.