Decía Italo Calvino que un clásico es un libro que nunca termina de decir lo que tiene que decir, pues en él cabe el universo. Pocas obras de la literatura española —y aun de la universal— despiertan tantas pasiones en sus lectores como la Celestina, obra maestra que, por su carácter dialógico y por su profunda ambigüedad, ha suscitado las lecturas más diversas, siempre defendidas con fervor, al punto de erigirse en un verdadero «instrumento de lid o contienda», tal como lo previeron sus autores. Moral, burla, sensualidad, hedonismo, desengaño y pesimismo coexisten contradictoriamente en la Celestina, produciendo un texto ambiguo y en el fondo inaprensible. Este libro constituye una carta de batalla a favor de la pluralidad y de la ambigüedad de esta obra maestra. Se proponen cinco lecturas distintas, todas centradas en el tema del amor y las pasiones, que parten del contexto ideológico y de la tradición a la que pertenece esta obra magna.