Duermes cubierta en tulipanes rojos,
al cuerpo lo anestesia el honor.
Eres una flor recién abierta con un meñique,
un aroma nuevo se bautiza terminando la noche,
el conejo bebe la leche de una luna transparente,
la milpa baila con el viento de tu casa.
Llegará la música y bailarán con tu esposo,
desde tu envoltura quieres que dé fin la fiesta:
toda virginidad es efímera.
En medio del corazón tienes un deseo que expira,
jamás volverás a jugar con muñecas
y jamás caminarás las calles en calzones almidonados
cuando tengas calor.