Perfeccionista, inquieto e insatisfecho tras pasarse la vida deprisa y corriendo, el COVID-19 le ha parado en seco. Cansado, regresa a casa y la encuentra desorganizada: en su cerebro hay un molesto y continuo chismorreo neuronal. El protagonista de esta historia reconoce que el miedo, la ansiedad, el estrés y la soledad han gobernado con frecuencia sus acciones, olvidándose de vivir y ser feliz. Esto le duele, pero está decidido a poner orden entre la mente, el corazón, el estómago y el sexo. Nada fácil, pero la suerte está echada.