Un perro que se mezcla con los seguidores de Juan el Bautista, y después de la muerte de Juan sigue a los que se han alineado tras el Nazareno, nos va llevando por diversas localidades de la antigua Palestina, por variados sucesos humanos, y nos muestra sus puntos de vista sobre el decir y actuar de los hombres. También se asombra con la personalidad del maestro, tiene dudas y se hace preguntas, pero permanece en el grupo de quienes caminan junto al “Pescador de hombres”, y nos conduce hasta descubrir los hilos de la intriga que envuelve a los protagonistas.