Relato que da título a esta colección de cuentos japoneses, nos narra la aventura nocturna de un joven estudiante cuya afición al dibujo es causa de castigo, pero que resulta finalmente un arma poderosa para vencer a un ser malvado. Lafcadio Hearn encontró en el Japón la calidez humana que había estado buscando durante toda su vida. Por eso cambió su nombre, se casó con la hija de un samurai y no volvió jamás a salir del archipiélago. La escritora americana Pearl S. Buck (premio Nobel de literatura, 1938), explica: «Cuando estuve en el Japón, no hace mucho, un anciano japonés que lo había conocido me habló de él. Había sido su discípulo en la Universidad, bastante tiempo atrás. Fue un profesor amable y querido, me dijo. Estoy segura de que así es como a Lafcadio Hearn le gustaría ser recordado. Estoy segura de que es lo que le gustaría que opinases al leer estos cuentos».