La Mitología Azteca se rescata y se redescubre cada día, en cada terremoto, en cada obra del Metro, en cada gran construcción, en cada excavación del sistema de aguas, al tiempo que se mantiene viva a través del náhuatl que hablan más de un millón de mexicanos, muchos de ellos en pleno centro del país, alrededor de lo que fue la gran Tenochtitlan.
En la presente obra el lector podrá descubrir sus mitos y sus leyendas, y ver con nuevos ojos y más amplias perspectivas, su verdadera esencia: lo que permanece en el contenido a pesar de los aparentes cambios del continente, y rescatar así un conocimiento primordial que escapa de los sincretismos del tiempo, de las manipulaciones inconscientes del hoyismo, y, sobre todo, de los intereses y de las creencias eclesiásticas y eurocéntricas.
Una lengua propia otorga identidad y conocimiento, independencia y albedrío, por lo que la lengua Náhuatl ha sido el vehículo del ser y el estar milenario de una tierra prodigiosa, paradójica y contradictoria, y, sin embargo, alegre, cálida y pujante, como sus leyendas, como sus mitos, como sus historias.