AMY SCHUMER irrumpió en la escena del stand-up norteamericano como un terremoto tras años de duro aprendizaje en los escenarios de oscuros clubs de comedia neoyorquinos y agotadoras giras cuando, tras quedar cuarta en el reality show “Last Comic Standing” de la NBC, se convirtió en una de las humoristas más cotizadas y provocadoras del showbiz. Lenguaraz y cáustica como pocas, su humor escatológico y procaz ha reinventado la comedia de micrófono abierto.
En La chica del tatuaje encima del culo, que llegó al número 1 en el ranking de bestsellers del New York Times, Schumer relata en una serie de episodios breves e intensos no solo su ascenso profesional, lleno de dificultades y tropiezos, sino también, de manera hilarante pero también brutalmente sincera, momentos centrales de su vida como la tensa relación con una madre manipuladora e inestable, la repentina enfermedad degenerativa de su padre, sus relaciones sentimentales —ya sea con sus amantes o con sus peluches—, sus filias (la comida, por supuesto, o el vino) o fobias (los gimnasios, el machismo recalcitrante, y un largo etcétera).
Amy Schumer ha protagonizado películas como Descontroladas (Snatched, 2017), ¡Qué guapa soy! (I Feel Pretty, 2018) o Y de repente tú (Trainwreck, dirigida por Judd Apatow en 2015), de la que también es coautora del guion, y es la creadora del programa de sketches humorísticos Inside Amy Schumer de Comedy Central, galardonado, entre otros premios, con un Emmy.