We use cookies to improve the Bookmate website experience and our recommendations.
To learn more, please read our Cookie Policy.
Accept All Cookies
Cookie Settings
Svg Vector Icons : http://www.onlinewebfonts.com/icon Something went wrong. Try again.
Estaciones de regreso, Jacobo Bergareche
es
Books
Jacobo Bergareche

Estaciones de regreso

  • Francisco Barrenahas quoted4 hours ago
    Salí a buscar a un muerto y terminé abriendo todas las tumbas en las que están enterradas las personas que he sido, y las que no he conseguido ser. Creí que después de e
  • Francisco Barrenahas quoted2 days ago
    Nos pasamos la vida tratando de que en nosotros brille siempre la juventud, de que brillen nuestra sonrisa y nuestra supuesta felicidad en el relato fotográfico que hacemos de nuestra vida, de que brillen nuestras posesiones más preciadas, ya sean coches, casas, títulos o libros en nuestra biblioteca, pero en realidad casi todo es una luz prestada, como la luz con la que brilla la luna, que de otro modo no es más que una oscura masa de polvo. Y lo más triste es que no sabemos reconocer el brillo de una luz auténtica hasta que no nos la revelan.
  • Francisco Barrenahas quoted2 days ago
    El funeral se celebró hace un par de días. Allí llegaron alumnos de varias generaciones, gente de sesenta años y universitarios de veinte. En primera fila vi a compañeros que no había visto desde los dieciocho años, a mujeres de las que estuve locamente enamorado alguna vez, caras, voces y cuerpos que te dan la medida de tu propia edad; en el centro estaban las sobrinas gallegas de Pura, su único hermano, junto a ellos estaba el rey Felipe VI, compungido, sin séquito, totalmente solo, callado y atento como un exalumno más.
  • Francisco Barrenahas quoted12 days ago
    jamás está triste ni excesivamente alegre, tiene esa consistencia anímica de las personas que no andan buscando la felicidad ni huyendo de la desgracia, a quienes les basta con la fatigosa paz del deber cumplido.
  • Francisco Barrenahas quoted17 days ago
    Les expliqué lo que me hacía sentir cada uno de esos cuadros y la razón por la que cada uno de ellos me apasionaba. No hay como tener a tu disposición unos ojos que aún no se han cansado de mirar para poder disfrutar de nuevo, casi como una primera vez, de los cuadros que uno ama. Los enfrenté a cada uno de ellos y les hice las preguntas que esos cuadros me hacen a mí. Pasé más tiempo mirando las caras que aquellos chicos ponían mientras observaban los cuadros que mirando ninguna pintura. Era en su asombro, en sus preguntas, en sus miradas donde volvía a recuperar la emoción de la primera vez.
  • Francisco Barrenahas quoted17 days ago
    Cuando uno no sabe definirse ni se preocupa demasiado por hacerlo, ya lo hacen los demás por él; no hay escapatoria a esa pregunta simplista que todos los que no nos quieren se hacen. Pero lo cierto es que no soy nada y no he conseguido ser nada, a estas alturas lo digo sin amargura y con cierto sentimiento de alivio.
  • Francisco Barrenahas quoted17 days ago
    Pero lo cierto es que no soy nada y no he conseguido ser nada, a estas alturas lo digo sin amargura y con cierto sentimiento de alivio.
  • Francisco Barrenahas quoted18 days ago
    Da bastante igual lo que un padre pueda enseñarle a un niño más allá de los trece años, a partir de cierta edad Lou Reed sabe más de la vida que el pringado de nuestro viejo, y lo que de verdad importa es algo que nuestros padres no saben o nos ocultan, algo que uno debe descubrir por su cuenta.
  • Francisco Barrenahas quoted19 days ago
    Los alumnos mayores, con mayor o menor fortuna, ya habían dado con su look propio, que incluía todo tipo de experimentos capilares que a los novatos nos habían estado vedados hasta ese momento, pues no solo carecíamos de barba, sino que nuestra cabellera había estado toda nuestra vida bajo la tutela estética de nuestras madres y sus peluqueras.
  • Francisco Barrenahas quoted19 days ago
    Los alumnos mayores, con mayor o menor fortuna, ya habían dado con su look propio, que incluía todo tipo de experimentos capilares que a los novatos nos habían estado vedados hasta ese momento, pues no solo carecíamos de barba, sino que nuestra cabellera había estado toda nuestra vida bajo la tutela estética de nuestras madres y sus peluqueras.
fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)