El libro documenta el encuentro que tuvo lugar en el año 1882. Pero también los textos que le anteceden y le siguen a lo largo de una década.
El intercambio espiritual y amistoso entre Nietzsche y Rée en los años anteriores a su encuentro con Lou v. Salomé coincide con una fase de la evolución de Nietzsche que él mismo ha llamado su «librepensamiento».
Nietzsche manifestó que Lou v. Salomé le hizo frente en sus respuestas. Lou v. Salomé definió su comportamiento: «Era infalible, algo me debía fascinar en el carácter y las palabras de Nietzsche».
En la época en que se conocieron, Lou v. Salomé escribió que «sólo Rée» cuenta para ella tanto «humana» como amicalmente.
Los documentos que presenta el texto ponen al lector ante la «vivencia de Lou» de Nietzsche. La pregunta, al revés, de qué significó la vivencia de Nietzsche para Lou v. Salomé y su evolución posterior no puede encontrar respuesta en este libro. Paul Rée, aún después de haberse separado de Nietzsche y posteriormente de Lou v. Salomé, continuó siendo siempre el mismo: un moralista, en el sentido de los moralistas franceses, un pesimista, un positivista y como a él le gustaba definirse, un ateo.