Jean Marchant, fotógrafo franco-ecuatoriano pierde a sus padres en un accidente automovilístico entrando en una profunda depresión. Impulsado por la pena y la nostalgia decide usar todos sus ahorros en un último viaje a Japón con una maleta llena de blues y su diario; en ese lugar donde espera alejar el dolor de su perdida se encontrara sin quererlo con Kenji, un niño víctima de la explotación sexual de un Yakuza psicótico e impulsado por June, el enigmático travesti que rige el prostíbulo donde labora el pequeño Kenji, se iniciará la complicada aventura para rescatar al muchacho de las garras de aquel mafioso japonés y en el camino se irán descubriendo secretos que van más allá del bien y del mal y adentrándonos a esquinas preternaturales de seres míticos en las calles del país nipón.