Cuarto de desechos es, sin lugar a dudas, una lectura difícil, no sólo por los sucesos narrados, sino porque sabemos que se trata de un diario que describe las experiencias vividas por la autora. No obstante, a pesar de las dificultades a las que se enfrenta, Carolina Maria de Jesus bien sabe que las causas de la desigualdad tienen nombre y apellido, ya sea el de los políticos que únicamente visitan la favela para conseguir votos y la olvidan en cuanto son elegidos, el de los comerciantes que van a arrojarles comida podrida e incluso el de los policías que acosan a los favelados en la ciudad