Seneca

«¿Para qué te procuras un amigo?». Para tener por quién poder morir, para tener a quién acompañar al destierro, oponiéndome a su muerte y sacrificándome por él

Dispones de lo que está puesto en manos de la suerte, desechas lo que está en las tuyas

El espacio que vivimos no es vida sino tiempo

la vida de los ocupados es brevísima.

El tiempo presente es sólo de días singulares, y su presencia consiste en instantes.

de éstos no hemos de decir que tienen vida descansada, sino ocupación ociosa.

Teméis como mortales todas las cosas, y como inmortales las deseáis.

¿Dirás tú, por ventura, que navegó mucho aquel que habiendo salido del puerto le trajo la cruel tempestad de una parte a otra, y forzado de la furia de encontrados vientos, anduvo dando bordos en un mismo paraje? Éste, aunque padeció mucho, no navegó mucho.

De éstos, el presente es brevísimo, el futuro dudoso, el pasado cierto;

la inútil curiosidad de aprender lo no necesario.