Una compilación muy honesta de historias personales sobre libros y bibliotecas. Múltiples autores se preguntan sobre sus libros y nos cuentan historias íntimas con la lectura como hilo. Lo disfruté mucho y como ejercicio reflexivo, me puse a mirar y limpiar mi biblioteca🩷.
Quizá haya repetido unas ocho, nueve, diez veces cada capítulo, intentando grabármelo. Sé que voy a regresar muchas veces más.
Que amena lectura, además de interesante, disfruté mucho escucharlo y ahora quiero leerlo en papel 😊
Me gustó bastante, las diferentes anécdotas en las que podemos identificarnos, el pretexto de hablar de las bibliotecas para tratar temas más íntimos. Las coincidencias entre los autores y autoras pero también sus diferencias 👌🏼
Ahora veo mi biblioteca con otros ojos y mis subrayados también 📝
Maravilloso conjunto de ensayos, ideal para bibliófilos. Lo ame! Quiero conseguirlo en físico.
Maravillosa
La narrativa de Mercedes Halfon es muy agradable de seguir. Su texto, que me pareció una mezcla de biografía, ensayo y crónica, te sorprende con versos dignos de ser llamados poesía. Verdaderamente, una obra valiosa. Si algo bueno pueden hacer nuestros ojos por nosotros, es leer este texto.
Es interesante escuchar estos ensayos sobre cómo las autoras Selva Almada, Brenda Lozano, Dolores Reyes y más han ido conformando o deshaciendo sus bibliotecas. Recomendable.
En una crítica literaria ley que "Hay libros que se le cuelan a una entre las costillas", esto me pasó con este libro, fue breve, se coló de forma sutil pero con mucha fuerza, por que el relato, en forma de diario, se va redactando con la brevedad de los días, con la fuerza del rugido íntimo y personal, ese huracán interno que nos revuelve a diario, si lo perdemos, estamos dejando de vivir irremediablemente.
Es un texto breve, mucho, pero se lee con tanta agilidad que se consume rápidamente, la vida misma se diluye con esa rapidez si se lo permitimos, si dejamos de percibir lo que la cotidianeidad nos ofrece, a ella la lleva a Alemania, no sabe orientarse, no habla bien el alemán ni el inglés, se relaciona con dificultad y se extravía en un lugar dónde se ve forzada a re encontrarse.
Me gustó, sobre todo por que Halfon nos dice entre líneas que los planes no son siempre los que se planean: “Eso ocurre con los orígenes. Hay un viaje muy ansiado e imaginado, tras el cual lo que se encuentra es otra cosa. Aun así, o precisamente por ese intercambio, hay un relato. Todo recomienza después del fuego y la decepción. Pero queda un residuo, una ceniza, cae un polvillo dorado, como una constatación.”
En una crítica literaria ley que "Hay libros que se le cuelan a una entre las costillas", esto me pasó con este libro, fue breve, se coló de forma sutil pero con mucha fuerza, por que el relato, en forma de diario, se va redactando con la brevedad de los días, con la fuerza del rugido íntimo y personal, ese huracán interno que nos revuelve a diario, si lo perdemos, estamos dejando de vivir irremediablemente.
Es un texto breve, mucho, pero se lee con tanta agilidad que se consume rápidamente, la vida misma se diluye con esa rapidez si se lo permitimos, si dejamos de percibir lo que la cotidianeidad nos ofrece, a ella la lleva a Alemania, no sabe orientarse, no habla bien el alemán ni el inglés, se relaciona con dificultad y se extravía en un lugar dónde se ve forzada a re encontrarse.
Me gustó, sobre todo por que Halfon nos dice entre líneas que los planes no son siempre los que se planean: “Eso ocurre con los orígenes. Hay un viaje muy ansiado e imaginado, tras el cual lo que se encuentra es otra cosa. Aun así, o precisamente por ese intercambio, hay un relato. Todo recomienza después del fuego y la decepción. Pero queda un residuo, una ceniza, cae un polvillo dorado, como una constatación.”