Es probable que entonces se vea colocado en una situación de doble vínculo por los pacientes que, por motivos a menudo recónditos, no pueden aceptar un cambio en el sentido de la mejoría, o para quienes es más
importante ser superior al otro en cualquier relación, incluyendo al médico, a pesar del malestar y el dolor que ello pueda producirles