siquiera miró a Murray el Peludo, que tenía las piernas, los brazos, la espalda y el cuello cubiertos de vello negro. En el mar negro de su pecho flotaba una estrella de David dorada colgada de una fina cadena de oro. Pensé que era posible que venciera a Larry. No se podía tener tanto vello sin ser superdotado. Tenía los brazos cortos pero parecían fuertes