Un libro de memorias único para vivir, gracias a la experiencia del doctor Juan Casado, los desafíos, las alegrías y las decepciones a los que se enfrenta un pediatra.
Más de cincuenta años avalan la trayectoria hospitalaria del autor que, a través de las vivencias compartidas con niños enfermos y sus familias, muestra los extraordinarios retos que abordan los profesionales sanitarios: escasez, incluso ausencia, de material curativo, errores en diagnósticos y tratamientos, sufrimiento causado por el dolor y la muerte, falta de empatía de algunos facultativos, doctores agotados por las circunstancias, malos tratos a menores, tristeza y depresión, enfermedades malditas, como la epilepsia, y vergonzantes, como la sífilis de recién nacidos, y muchas otras.
Un excepcional conjunto de recuerdos a través de los cuales el doctor Casado nos lleva delicadamente de la mano para atravesar el desfiladero de nuestro lado más frágil: la salud de nuestros hijos.
«Soy médico, tengo casi ochenta años y no quiero jubilarme. Esta es la tragedia y también la bendición de mi vida: soy médico de vocación y por eso no quiero jubilarme, seguiré escuchando y ayudando a mis pacientes hasta que me muera o hasta que mi cabeza sea inservible para esa tarea».