Julen Gabiria obtuvo el premio Igartza en el año 2004 por esta novela escrita originalmente en euskera. Tras numerosas ediciones en dicho idioma y una traducción igual de exitosa al neerlandés, se publica finalmente en castellano esta extraordinaria novela que comienza en el País Vasco, pero está ambientada, sobre todo, en la Italia a la que se le venía encima la II Guerra Mundial. Una novela difícil de clasificar y en la que las bicicletas sirven de nexo de unión entre los dos países. Un niño, Román Alberdi, ve por primera vez al gran ciclista italiano Gino Bartali en la Vuelta al País Vasco. Como niño exiliado por la Guerra Civil, volverá a encontrarse con él en el Tour de Francia, ascendiendo un puerto de los Alpes. Posteriormente, irá en su búsqueda a la localidad toscana de Ponte a Ema. Además de ciclismo, muchos más temas y personajes se entremezclan en el libro: el cinéfilo que proyecta películas a escondidas, el fraile que evangeliza a los pájaros, el marinero portugués que se ha quedado en tierra, el panadero que todos los días hornea una barra más especial que el resto de panes, la vendedora de leche que tiene que esconder su identidad… Un estilo fresco, una atmósfera soñadora, toques surrealistas y una llamada a la insurrección contra las injusticias se mezclan en esta obra que demuestra que la literatura y la vida pueden ir de la mano.