bookmate game
es
Fiódor Dostoyevski

Memorias del subsuelo

Notify me when the book’s added
To read this book, upload an EPUB or FB2 file to Bookmate. How do I upload a book?
«Memorias del subsuelo» es una obra contradictoria, no exenta de matices. En forma de diálogo, un hombre sin nombre ni identidad concreta, excepto la de ser un funcionario, como se presenta a sí mismo desde las primeras páginas, va narrando las memorias de su tragedia personal. Dostoievski logra crear con él uno de los mejores y más impactantes antihéroes de su ingente producción novelística, como lo son Raskólnikov o Iván Karamázov, un sujeto retórico de difícil imitación, en el que las raíces eslavófilas y el innegable rechazo a la imposición burocrática se aúnan en todo un tratado. Fiódor M. Dostoievski escribe «Memorias del subsuelo» en un momento social y político bastante complejo, al que se une la delicada situación personal por la que el autor estaba atravesando: su mujer se moría y su tormentosa relación sentimental con una joven le causaba dudas y remordimientos que incidían en una evidente crisis personal. El resultado de esa situación histórica, personal, vital y anímica es una obra que en pocas páginas concentra más contenido filosófico que ninguna otra obra del autor, y en la que se plantean las cuestiones más extremas que un hombre pueda hacer.
This book is currently unavailable
247 printed pages
Have you already read it? How did you like it?
👍👎

Quotes

  • Danny Giraldohas quoted2 years ago
    Permítanme señores, pero no me estoy disculpando con esta generalización. Respecto a mí, he de decir, que he llevado hasta el último extremo aquello que ustedes no se han atrevido a llevar ni a mitad del camino, y por si fuera poco, toman por cordura su propia cobardía y se tranquilizan engañándose a sí mismos. ¡Hasta posiblemente resulte que esté yo más «vivo» que todos ustedes! ¡Vayan con más cuidado! ¡Ni siquiera sabemos en qué consisten las cosas vivas, ni qué es lo vivo, ni qué nombre tiene! ¡Déjenos solos y sin libros, y al momento nos extraviaremos, nos perderemos, no sabremos qué hacer, ni dónde dirigirnos; qué amar y qué odiar, qué respetar y qué despreciar! Nos pesa ser hombres, hombres auténticos, de carne y hueso. Nos avergonzamos de ello, lo tomamos por algo deshonroso y nos esforzamos en convertimos en una nueva especie de seres omnihumanos. Hemos nacido muertos y hace tiempo que ya no procedemos de padres vivos, cosa que nos agrada cada vez más. Le estamos cogiendo gusto. Pronto inventaremos la manera de nacer de las ideas. Pero por ahora basta; no quiero escribir más «desde el Subsuelo».
  • Danny Giraldohas quoted2 years ago
    Nos pesa ser hombres, hombres auténticos, de carne y hueso. Nos avergonzamos de ello, lo tomamos por algo deshonroso y nos esforzamos en convertimos en una nueva especie de seres omnihumanos. Hemos nacido muertos y hace tiempo que ya no procedemos de padres vivos, cosa que nos agrada cada vez más. Le estamos cogiendo gusto. Pronto inventaremos la manera de nacer de las ideas. Pero por ahora basta; no quiero escribir más «desde el Subsuelo».
  • Danny Giraldohas quoted2 years ago
    la

    razón —dice Dostoievski— es indudablemente algo excelente, pero la razón es únicamente razón, y sólo satisface las cualidades racionales del hombre, mientras que la voluntad, viene a ser manifestación de la vida entera, es decir, de la vida completa del hombre, incluyendo en ésta, tanto la razón como todo tipo de especulación. Y aunque nuestra vida —continúa el autor— en esta manifestación se nos presente a menudo como una porquería es, a pesar de todo, vida, y no mera extracción de la raíz cuadrada. Además, ¿qué libre albedrío puede haber aquí, cuando el asunto llega hasta el punto de disponer de una tabla matemática y aritmética, cuando lo único verdaderamente importante sea, que dos y dos sumen cuatro?

    Y es que ocurre, que para Dostoievski, la certeza de que «dos más dos suman siempre cuatro, no es vida, sino comienzo de la muerte». Así pues, el «dos y dos son cuatro», es para él, «una cosa insoportable». En su opinión, el hecho de que

    dos y dos sean cuatro, es una desfachatez. Porque dos y dos son cuatro, se pavonea, atravesándose en medio del camino con los brazos en jarras y nos lanza un escupitajo, dice. Estoy de acuerdo que «dos y dos son cuatro» es algo maravilloso; pero si hemos de decirlo todo, entonces «dos y dos son cinco» también puede ser a veces algo mucho más atractivo.

On the bookshelves

fb2epub
Drag & drop your files (not more than 5 at once)