Cuando los hermanos Evans se mudan a Wealdford se enteran de que la mansión en la que van a vivir había estado abandonada por un terrible incidente. Más tarde se hacen amigos de unos chicos que tienen un gran secreto que esconder, pero como es de esperar en este pueblo, sus historias están más relacionadas de lo que creen. Aaron, el hermano mayor, desaparece sin dejar rastro alguno, por lo que Tom (el hermano menor) deberá unirse con sus nuevos amigos para poder encontrarlo y, en el camino, darse cuenta de que nada es lo que parece y no puede confiar en nadie a su alrededor. Ni siquiera de su propia familia.