El Reiki, técnica manual oriental basada en la importancia del tacto, revela algo fundamental: la energía sanadora está en las manos y, lo que es más importante y poco conocido, al alcance de todos. Tocando ciertas zonas específicas del cuerpo es posible eliminar el malestar producido por cientos de males (tanto físicos, como psíquicos y espirituales) de manera completamente natural.