Organización y gestión del aula de Educación Infantil pretende transmitir a los futuros maestros y maestras cómo será su profesión dentro del aula de educación infantil. Partiendo del derecho a la educación para todos, se comienza trabajando los desafíos que supone la inclusión educativa para todo docente que quiere propiciar el pleno desarrollo de su alumnado. En este ámbito, se muestra el Diseño Universal de Aprendizaje como aquella metodología que favorece el acceso al currículo a todo el mundo. Dentro del aula destacan como elementos sinónimos de calidad y eficacia un clima positivo y la convivencia. Por ello y con la finalidad de favorecer la mejora del rendimiento académico, se expone la construcción de entornos positivos mediante un modelo de convivencia. También se aborda la gestión y la organización del tiempo en esta etapa dentro del aula, pues resulta crucial el acompañamiento en los diferentes momentos de la vida cotidiana a través de la espera y la observación. Siguiendo con la organización dentro del aula, se confiere una especial atención a la existencia y uso de diferentes espacios, otorgando la relevancia que merece el desarrollo de diferentes ambientes de aprendizaje, que atiendan a aspectos físicos, pedagógicos y temporales, así como a las agrupaciones, interacciones y relaciones sociales. La organización de los recursos didácticos es un elemento central para el desarrollo de actividades y de cualquier acción dentro del aula, siendo necesario su conocimiento conceptual para los maestros y maestras, así como las múltiples clasificaciones que se pueden hacer, las maneras en las que se pueden aprovechar y sus condiciones organizativas. Otro aspecto a tener en cuenta para la gestión del aula es la comunicación como foco de atención prioritario en su dirección, para la cual se presentan técnicas y estrategias como la asertividad, la asamblea, los centros de interés o los proyectos. No se puede olvidar la importancia que tiene para cualquier docente el cultivo de sus competencias emocionales. Por esta razón, se ayuda a identificar cuáles son, analizando los elementos que contribuyen al bienestar docente, sus causas y los diferentes motivos que pueden llevar a grandes perjuicios como el denominado síndrome del burnout. Dentro de una etapa educativa como la educación infantil, es vital que se conozca una fase ineludible como es el periodo de adaptación. En esta misma línea, se desarrollan diferentes estrategias metodológicas. Una fundamental son los hábitos y rutinas, como aquellos marcos cotidianos que van a ayudar a favorecer el aprendizaje. Además de estas, no se pueden obviar otras tan valiosas como los rincones o los talleres. Se concluye con el conocimiento de los diferentes agentes educativos que influyen en el buen funcionamiento del proceso educativo, resaltando la figura del tutor o tutora como dinamizador de la participación de las familias en el centro. Se espera que todo lo enumerado ayude a ofrecer una formación lo más completa posible en términos organizativos del futuro docente de infantil, y de esta manera poder contribuir a la asunción de la responsabilidad que se le debe conferir a esta etapa.