En la cuarta edición del Ensayo, publicada en 1700, el otrora médico desarrolló más el tema de las asociaciones equivocadas. La locura y las ilusiones menos graves «provienen de una misma raíz y dependen de la misma causa. Esta consideración de la cosa misma (la locura), en un momento en el que no pensaba en absoluto sobre un tema que no abordaba, me lo sugirió». En la edición de 1700, Locke también añadió su famoso capítulo «Sobre la asociación de ideas», donde, asombrosamente, no citaba ni daba crédito a ningún predecesor.