Candida Royalle: «Nos hemos convertido en una cultura altamente sexualizada, pero es consumismo y sexo, corriente dominante y convertidos en cultura pop. Cuando uno lo piensa, es una forma de neutralizar el asunto… hace que todo se vuelva seguro y agradable al paladar, silencia a los radicales. Una vez que esto ocurre, el poder real se ve disipado por completo».