En 2014, por otro lado, el entonces gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa demandó a FERROSUR responsabilizando a la empresa de todos los problemas que vivieran los migrantes, debido a que su personal era el que los dejaba subir al tren. A partir de ahí “La Bestia” dejó de ser la principal vía de traslado de los migrantes, ya que las autoridades migratorias reforzaron los operativos, por lo que la gran mayoría de centroamericanos, desde entonces, tiene que realizar su trayecto en autobuses y a pie.