Todos hacemos muchas cosas que, en otra parte, serían vistas como formas de perder el tiempo: leer, caminar, nadar, correr, escribir. ¿Qué podría decir sobre nosotros un improbable sujeto que, dentro de años, intentara, como intento con Capote, reconstruir nuestras vidas en Sanià? Sucede de todo y no sucede nada. Las cosas que importan suceden donde nadie las ve.