-Cuando se marcha hacia adelante, hay que luchar incluso contra uno mismo. Hay que saber sacrificarlo todo, hasta el corazón. Consagrar la vida a una causa, morir por ella, no es difícil. Sacrifica más, sacrifica también lo que te es más querido que la vida: entonces, crecerá con fuerza lo que de más caro hay en ti, ¡tu verdad!