Todos dicen que es la muerte misma llevando las riendas de un negro vagón cargado de cadáveres. Ante el desconcierto de las fuerzas del orden y de toda la sociedad santiaguina, es Manolo, un muchacho irreverente y valeroso, maestro en el arte del disfraz y la fuga, quien se aventura en la peligrosa misión por desentrañar el misterio.