Ensayo sobre la lucidez

la censura bien entendida es como el sol, que cuando nace, nace para todos, para nosotros no es ninguna novedad, ya sabemos que así va el mundo, siempre son los justos quienes pagan por los pecadores.

El diablo tiene tan buen oído que no necesita que se le digan las cosas en voz alta, Entonces que dios nos valga, No vale la pena, ése es sordo de nacimiento.

la atención de la gente con el paralelismo entre la blancura de la ceguera de hace cuatro años y el voto en blanco de ahora

No eran cuatro chispas míseras, eran cubos, eran cántaros, eran nilos, iguazús y ganges, pero la fe, bendita sea para siempre jamás,

para que la muerte deje de existir basta con no pronunciar el término con que la designamos

humanos son universalmente conocidos como los únicos animales capaces de mentir, siendo cierto que si a veces lo hacen por miedo, y a veces por interés, también a veces lo hacen porque comprenden a tiempo que ésa es la única manera a su alcance de defender la verdad.

La esperanza es como la sal, no alimenta pero da sabor al pan,

sursum corda, es decir, corazones en alto,

tu peor enemigo, según la ley de los ciegos, es siempre aquel que está más cerca de ti, Pero no necesitamos estar ciegos para no saber adónde vamos, pensó.

lo incomprensible puede ser despreciado