No bolas, te estoy jodiendo. Cuando finalmente me penetraste, habías hecho un laburo previo magistral; cada vez que tiraba mi culo hacia atrás y vos te alejabas, te quería cagar a trompadas... me hiciste rogar por pija y después tuve el premio; solo que me empomaste como media hora y duro. Convengamos conque, el tamaño de tu pija, hay que bancárselo –dijo Matías