Teodorico Canto de Soslayo vive encerrado a cal y canto en su biblioteca, obsesionado con la lectura, pero un día enferma y el doctor Carmelo Cotón le receta un buen paseo diario, además de recomendarle que se afeite la barba para tener una mejor apariencia.
Así es como este personaje empieza a recorrer las calles de su ciudad, hasta que una mañana, aburrido de pisar tanto asfalto, mira hacia arriba y descubre unos montes cuya existencia le había, hasta entonces, pasado desapercibida. Se inicia pues en el arte del excursionismo, llevándonos de la mano por senderos y veredas de Sierra Nevada, y, por supuesto, a sus más altas cumbres.
Comedia con tintes surrealistas y sana moraleja se acoplan en estas páginas para que los más pequeños, y todos los amantes de la aventura, descubran el corazón de la cordillera más sureña de Europa.
Incluye cuaderno de actividades.
Álbum ilustrado por Agata Lech-Sobczak.