El Corsario Negro goza el honor de ser considerada como la más perfecta de todas las novelas de Salgari, al ser en ella donde la prosa del escritor italiano logra la fluidez y el estilo más depurado de toda su producción. Las aventuras de este singular personaje, y su saga de relatos que componen el Ciclo de los corsarios, nacieron como respuesta a su nombramiento como caballero por la casa de Saboya, reinante entonces en Italia. Salgari creó un personaje italiano emparentado con dicha casa, Emilio di Roccanegra, señor de Ventimiglia, que decide dedicarse a la piratería para poder vengarse por la muerte de su hermano a manos del gobernador de Maracaibo, el flamenco Wan Guld; mas el destino es caprichoso, y cruza en su camino a la bella Honorata, quien esconde un amargo secreto. La novela, que mezcla ciertas partes de realidad histórica con otras de ficción, es un emocionante relato por tierras americanas, en el que no faltan los principales ingredientes de un libro de aventuras… de piratas: intriga, acción y pasión.