Según la IA débil, el valor fundamental de los computadores en el estudio de la mente radica en que nos proporcionan una herramienta muy poderosa. Por ejemplo, nos permiten formular y poner a prueba hipótesis de manera más rigurosa y precisa. Sin embargo, de acuerdo con la IA fuerte, el computador no es una mera herramienta en el estudio de la mente, sino más bien, si se programa de forma adecuada, una mente en sí en el sentido de que puede, literalmente, comprender y manifestar otros estados cognitivos. En la IA fuerte, debido a que el computador programado tiene estados cognitivos, los programas no son meras herramientas que nos permiten poner a prueba explicaciones psicológicas; los programas son, en sí mismos, explicaciones.