En la cárcel de mujeres se fabrica un “universo femenino” que materializa el performance de género tanto en la organización del espacio como en la del tiempo. Tal universo parece construirse como evidencia empírica de la existencia real de ciertas ideas acerca de la feminidad, que se crea y es puesta en acto en todos los elementos que la componen. Como toda construcción identitaria, esta trata de uniformar a todas las personas en su ámbito. El discurso sobre la criminalidad de las mujeres y su concreción en los espacios penitenciarios participan en la formulación social de la maternidad como construcción de género, la cual a su vez está atravesada y mediatizada por la experiencia de las presas. Este trabajo estudia la cárcel como un lugar antropológico que permite enmarcar, en una situación específica, los procesos mediante los cuales se construyen discursivamente el género y la maternidad; y busca iluminar algunos aspectos que suelen quedar en la oscuridad resultante de la «naturalización” ideológica. Nos permite asimismo internarnos en la experiencia subjetiva de las mujeres encarceladas y ver ángulos nuevos en el análisis de los procesos mediante los cuales dichos discursos se encarnan en ellas. La manera en que se entiende y se vive la maternidad en prisión nos informa también de qué manera las instituciones sociales concretan y reproducen los supuestos del contexto en que tienen su origen. Con ello resulta posible saber cómo el sistema carcelario participa también en la producción del género.