En los últimos decenios, la historiografía del antiguo Israel ha dado muchos pasos adelante, sobre todo por lo que mira a los siglos más antiguos. Gracias a la valoración de los descubrimientos epigráficos y arqueológicos del último siglo y a la evaluación más atenta y consciente de las narraciones bíblicas, nos hemos dado cuenta que ya no es posible limitarse a la Biblia para obtener un material completo sobre la historia de Israel.