Un niño no deseado, no querido, no amado por el Otro es un niño destinado a experimentar su vida como disociada del sentido, una vida desarraigada, superflua y carente de valor. Estos niños, prosigue Lacan, quieren salir de ese juego de la vida que no ha contado con ellos, «no aceptan ser lo que son, rechazan esa cadena significante en la que solo a regañadientes han sido admitidos por su madre»