Por eso todo es tan lindo.
Y no querría despedirme sin antes recordarles
que no hay nada más lindo que todo lo que nos pasó,
incluso habiéndonos pasados cosas no tan lindas.
Así como tampoco hay nada más lindo
que todo lo que todavía nos está por pasar.
No hay nada más lindo,
para terminar,
que que hoy estemos juntos.