La obra literaria de Andréiev puede considerarse como una de las manifestaciones culturales más originales y controvertidas de la Rusia de comienzos del siglo XX. Bajo el título de El abismo, uno de los ocho relatos que compone este libro, todos escritos entre 1900 y 1908, volvemos a encontrarnos con esa prosa limpia, llana y plena de misterio que con gran maestría sabe desplegar el autor. Cada uno de sus relatos, sugerentes, cautivantes y de variados matices, nos hacen recorrer los laberintos claroscuros de la condición humana, vitales, por momentos luminosos, aunque esa claridad muchas veces solo nos alerte de las sombras que han de esparcirse sobre los personajes atrapados por sus deseos, impulsos, obsesiones, frustraciones o existencias precarias, que hacen de la vida un enorme desvarío.