Lucy y su hermano se mudan. Hace ya unos años que su mamá murió y su padre necesita la ayuda de la abuela para cuidar de los niños. La niña desearía una mascota, pero a su querida abuelita no le gustan los animales. Un día no puede evitar enamorarse de una gatita callejera, a la que comienza a cuidar en secreto… hasta que ese secreto tan particular se descubra y entonces se da cuenta de que a lo mejor la abuela y papá aceptarían con gusto a la minina.