En esta obra Alexy desarrolla su fundamentación de las decisiones judiciales o teoría de la argumentación jurídica. Su concepción es eminentemente racional y parte de la teoría del discurso de Habermas, en el intento de lograr un modelo de argumentación jurídica que corresponda al Estado constitucional democrático. La singularidad del punto de vista que aquí expone radica en que considera la argumentación jurídica como un caso especial del discurso práctico general.