Relato sencillo, contado desde la perspectiva de una de sus más grandes leyendas, que permite conocer la organización y tradición del barrio de Gion Kobu.
Mineko logra transmitir sus sentimientos y emociones de una manera tan natural, que pareciera que estamos leyendo el relato de una antigua amiga.
Es perfecto para conocer las dificultades y placeres de este oficio japonés, y que mejor que hacerlo a través de la mirada de una mujer que estuvo inmersa en este ambiente durante tantos años, tomando en cuenta además la crudeza del ambiente laboral en cualquier lugar del mundo..
Un libro con el que pude identificarme con Mineko.
También desmiente varias “costumbres” que se creían de las geishas, o en este caso, las maiko