lo largo de esta investigación periodística se obtuvieron testimonios de testigos presenciales de los ataques, quienes refieren que se utilizaron camionetas oscuras con hombres de apariencia militar en los primeros disparos contra los estudiantes en el centro de Iguala, así como al perseguirlos después de la medianoche tras el segundo ataque, en la calle Juan N. Álvarez.