Hipólito de Roma, sacerdote romano sin duda alguna procedente de Oriente, muere mártir probablemente en 235. Se autodenomina discípulo de Ireneo. Es, sin lugar a dudas, el autor de la Refutación de todas las herejías, tratado al que a menudo se denomina Philosophumena a causa del contenido del primer Libro. Para probar el carácter no cristiano de las herejías de las que habla, Hipólito intenta establecer la dependencia de éstas en relación a la filosofía y el pensamiento pagano