—Chloe, ¿por qué no me dijiste que tenías problemas de ansiedad? Sabes que nunca estoy demasiado ocupada para ti, no importa cuántos maridos o hijos tenga.
—Tienes un marido, cielo —dice Sawyer, que entra en la sala en ese momento.
—Aún eres el único hombre para mí, cariño.
—Llevamos casados tres meses, Everly. Más vale que aún sea el único hombre.